Cuento de Amor

Esta es una historia tan real que merece ser contada:

Corría el año de 1903 por la antigua región agrícola de lo que ahora es Julimes, una pareja de hacendados: Don Florencio de la Barca Ponce estaba casado con la muy bella señora Doña Leonor Vivar y Grijalba Castillo, esta última era ahijada de Don Joaquín Terrazas el heroe de 3 Castillos y hermano de don Luis el excéntrico lugarteniente del estado.

Don Florencio y doña Barbara buscaron sin mucho éxito procrear familia, lo más seguro alguna maldición apache les había negado la posibilidad de ser padres. Un día después de rezar un rosario y prender una veladora a Santa Rosalía, se dio el milagro: Serán padres. Nueve meses de feliz espera trajo consigo a una hermosa niña, (no es por ser racista o malo, solo es para el cuento) rubia, ojos enormes de un azul hermoso, una sonrisa espectacular a la que bautizaron María de la Gracia Isabel de la Barca Vivar y Grijalba. Los trabajadores más cercanos a los hacendados le hicieron el bien de llamarla "Niña Bonita".

Por ese época, el ciclo de la vida se llevo a una joven madre soltera, Arcadia Pérez. Muy conocida en el lugar por su amabilidad con el sexo opuesto (if you know what i mean) y excelente amiga de don Florencio. La perdida fue una tristeza enorme para la mitad del pueblo, pero don Florencio como buen amigo se hizo cargo del niño de 3 años, Juan Perez, educándolo y tratándolo como si fuera de la familia, claro sin serlo.

Pasaron los años y la Niña Bonita se ponía cada día más bella, sonriente y con una inteligencia como pocas. Juan creció hasta los 1.87 metros, fornido y buen mozo. Lo que hizo que que el pueblo le llamara el "Juanon". 

Juanon ademas de galán era trabajador, buen líder y muy inteligente; lo que hizo que don Florencio estuviera muy contento con el, tanto así que era su mano derecha; además de ser uno de los poquísimos hombres que podían acercar a la Niña Bonita. La juventud y el poco contacto con los hombres por parte de ella (aclarando) hizo que la hormona y el amor brotara.

El por las noches subía a su balcón para platicar con ella. La Niña Bonita a veces le daba la mano, otras ocasiones le daba unos tamales, porque el hambre era canija. (y para enamorar nada como la comida) Pueblo chico infierno grande, y "no paso rato" pa' que alguien fuera de chismoso con Don Florencio: algunos dicen que fue el General Mendoza que estaba enamorado de la Niña, otros que Macaria la eterna enamorada de Juanon y otros despitados dicen que fue Juan Flor un hombre muy "alegre" que también era el eterno enamorado de Juanon y del General y de Don Florencio en fin ya saben.

La noticia enfureció a toda la familia De la Barca Vivar y Grijalba, lo cual hizo que corrieran a Juanon y encerraron a la Niña Bonita. Pero esto no los detuvo; como buen macho de aquella época se la iba a robar. Esa tarde por algún medio le hizo llegar una nota:

..."Amor:

Preparate esta noche

 para salir corriendo y 

huir por nuestro destino

Cordialmente tuyo 

tú Juanon"...

Alguno se preguntará: ¿Por qué corriendo y no en caballo que es mas romántico y sobre todo más rápido?

Sencillo: con el caballo el sonido de que alguien viene alertaría a la personas además las huellas de la huida serian más evidente para el ojo no entrenado. Como les dije Juanon era muy inteligente.

En la madrugada se dieron cuenta que la Niña ya no estaba, Don Florencio "encabritao" fue a llamar a Andrés, un jornalero con mucha experiencia en la caza por lo cual era el mejor rastreador de toda la zona. Junto hombres y salieron en busca del amor juvenil.

Florencio decía: "...Apúrate Andrés antes que pase lo irremediable..."; no se preocupe patrón, aquí están las huellitas de la Niña Bonita y las huellotas de Juanon. 

Minutos después; Florencio decía: "...Apúrate Andrés antes que pase lo irremediable..."; no se preocupe patrón, aquí están las huellitas de la Niña Bonita y las huellotas de Juanon.

Cerca de un álamo: Florencio decía: "...Apúrate Andrés antes que pase lo irremediable..."; no se preocupe patrón, aquí están las huellitas de la Niña Bonita y las huellotas de Juanon.

En el lecho de un arroyo: Florencio decía: "...Apúrate Andrés antes que pase lo irremediable..."; yo creo que nos regresamos patrón, "¿por qué lo dices Andrés?", es que aquí veo las pompitas de la niña bonita y las rodillotas de Juanon.